
La naturaleza como guía | Mandalas y yantras
La naturaleza como guía | Mandalas y yantras
Si observamos atentamente las formas de la naturaleza, encontraremos una constante en el modo que tienen de desarrollarse. La estructura de los árboles, la de sus hojas, la de sus flores, el diseño del cuerpo humano, o de los animales, los cristales minerales, los cuerpos celestes, las moléculas, cada átomo, cada espermatozoide, cada semilla revela un mismo patrón básico: desde un punto inaprehensible que funciona como centro motor o eje, se despliega la forma adoptando diferentes características cambiantes.
Existen infinitas ciencias que estudian las particularidades de cada una de estas manifestaciones naturales, pero cuando se pretende abordar ese punto inhallable, ese origen imposible de ser descripto, es cuando el lenguaje racional encuentra sus límites.
Los pueblos antiguos utilizaron el lenguaje simbólico para la expresión de sus cosmovisiones, ¿Qué formas visuales imaginan fueron las más recurrentes para expresar el equilibrio sagrado, o divino? Las formas centradas! Los templos o símbolos sagrados más poderosos de la antigüedad consisten en formas cuya estructura se despliega a partir de un centro, u eje central, adoptando diversas particularidades en sus diferentes etapas de expansión; del mismo modo que lo hacen las poderosas formas de la naturaleza. Ahora… ¿para qué reiterar ese proceso? ¿Para qué emular una creación natural?